Noticias del 12 de Mayo de 2007
Vecino dice que secuestradores se entregaron
Ciudad del Este. Alto Paraná.-Los ocupantes de la casa se entregaron, fueron golpeados y, finalmente, ultimados en el patio. También se dispararon sus armas. Esto se desprende de relatos realizados por vecinos del lugar que oyeron lo que ocurría en la vivienda del kilómetro 20, el sábado. Todos coinciden en que todo comenzó alrededor de las 5 y duró más de media hora.
Liborio Monges vive a unos 50 metros de la casa y es primo de Mario Leguizamón y sobrino de Amancio Leguizamón, ambos fallecidos. Afirma que ese día, alrededor de las 4:30, se levantó para trabajar y fue sorprendido por policías que ingresaron a su casa, lo tiraron al suelo y revisaron su vivienda. Lo golpearon en la frente. Luego pasaron a la casa de sus parientes.
"Quedate. Antisecuestro. Policía, me dijeron. Yo me quedé y ellos me tiraron al piso, me golpearon en la cabeza porque primero yo no entendía nada y no me quería quedar. Después me quedé. Revisaron la casa. Estuvieron como 20 minutos en mi casa. Había como 20 policías en el patio y 10 entraron. Después alguien les llamó por teléfono y se fueron a la otra casa", dijo Monges.
"Sí, escuché gritos. A las 5:30 por ahí. 'Ay, ejedeja, anína ehuga orerehe, ndaha'éi ore', péicha he'i. Mokõi inocente ningo omanoite upépe, ore pariente, che tio ha peteî che primo", añadió.
Acerca de si la Policía disparó primero o fueron los ocupantes de la vivienda, Monges indicó: "Ombokapu hikuái (los policías) pero yvate... amo ventána ári ojekuaa voi la tíro ojejapihague yvate... Hyepyguio ojekuaa oñembokapu hague yvate... pórque la okáguio ojejapírongo de ótro voi... naimo'ái ete la opataha péicha..."
ENFRENTAMIENTO
"La policía raê ombokapu... pero ha'ekuéra ombokapu yvate... ha la hyepype oîvaekue ombokapu priméro la rífle... pórque ha'ekuéra oguereko peteî rífle, upéa che aikuaporãiterei orekoha hikuái...", agregó.
"Péa onohemba chupekuéra okápe hikuái ha upépe ojuka chupekuéra. La tiroteo oiko oiméne una hora mba'e... guerrahápe guáicha... Orresponde hikuái, upéaguinte por lo méno umi policía oenfrenta chupekuéra...", indicó Monges.
Respecto a Amancio y Mario Leguizamón, señaló: "Che gentekuéra sin motívo ojejuká hikuái... ha'ekuéra ojaposégui favor upe hapichápe ou oikó hendivekuéra upépe... Ore ndoroikuaái py umi típo upéicha ha...".
Según Monges, entonces, la Policía Nacional fue recibida con disparos, luego los uniformados consiguieron reducir a los ocupantes de la vivienda, en el patio los golpearon y, finalmente, se escucharon nuevamente disparos, que ya habrían sido los que acabaron con la vida de las seis personas.
El vecino y pariente de dos de los fallecidos dijo que Cristian Sebastián Morales conocía a Amancio Leguizamón de fiestas realizadas hacia el kilómetro 22 de Minga Guazú y que unos 8 días antes del enfrentamiento, llegó a la casa Nancy Martínez y unos 4 días antes, lo hicieron Morales, Rildo Ramírez y César González. Acerca de si en la fecha en que Hirokasu Ohta, Sawako Takayama, Rafael Ramos Balmori y Nancy Giménez estaban secuestrados, escuchó o vio movimientos raros en la casa de sus parientes, dijo que no.
Nicanor respalda la labor de la Policía
El presidente Duarte Frutos ratificó ayer su pleno respaldo a la gestión de la Policía ante las denuncias de presuntas torturas a los delincuentes del último secuestro en Minga Guazú, Alto Paraná. Justificó la labor policial y dijo que la "Policía actuó correctamente y que no tuvo otra alternativa ante los hechos".
"Bueno, cada vez que la Policía actúa con coraje, con resolución, este tipo de comentarios o de denuncias siempre surge, estamos preparados para estas contingencias y para estos vaivenes de la opinión pública, pero cuando la Policía es acribillada, cuando muchos de nuestros hombres mueren en cumplimiento de sus fines, lamentablemente no siempre existe ese tipo de interrogante", manifestó.
A renglón seguido señaló que "yo creo que la prensa ha sido testigo en qué condiciones tuvo que actuar la Policía y frente a qué escenario y a qué actores de la delincuencia". Duarte Frutos habló frente a la sede de la Comandancia de la Policía donde hizo entrega de 8 nuevos camiones para ser utilizado por los efectivos en distintos puntos del país.
El comandante de la Policía, Fidel Isasa, dijo que de ninguna manera la Policía se responsabiliza de las presuntas torturas sufridas por los supuestos secuestradores acribillados en Alto Paraná y señaló que existen filmaciones y fotografías que fueron tomadas después del operativo policial que prueban lo contrario.
El ministro del Interior, Rogelio Benítez, ratificó su respaldo a la labor policial y la intervención del fiscal Ortúzar. Luego advirtió a delincuentes que la misma respuesta que tuvieron los presuntos secuestradores en el Alto Paraná la tendrán si es que deciden enfrentar a la Policía Nacional.
Defensor del Pueblo pidió investigación
El defensor del Pueblo Adjunto, Édgar Villalba, visitó a la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Ana María de Acha, y sugirió la conformación de una comisión para investigar la masacre de los presuntos secuestradores en el Este. Criticó duramente al fiscal Rogelio Ortúzar, y dijo que violó la ley, e igualmente cuestionó el accionar de la Policía Nacional.
"Es sobre el acribillamiento de estos seis ciudadanos, entre los cuales están dos personas que carecen de antecedentes penales, y un menor de edad, y la irregular actuación del fiscal Ortúzar, que es de público conocimiento, disfrazado, interviniendo ilegalmente, violando la Ley 1.910/02, que regula la portación de armas de fuego, armas de guerra en particular, así como el reglamento de la Fiscalía General del Estado, y varias leyes de la República", dijo Villalba.
El defensor adjunto dijo que "estamos ante una situación grave, que de no ser investigada seria y profundamente, y aclarada a la opinión pública, podría ser el principio de la creación de los escuadrones de la muerte" ratificó el funcionario, expresando su preocupación por la situación que se viene suscitando.
Por otro lado, el Partido Frente Amplio (PFA) también comunicado mediante repudia la actuación de la Policía que bajo la "dirección" del fiscal Rogelio Ortúzar ha violentado la Constitución Nacional y todo el procedimiento jurídico para sancionar la delincuencia. El documento está firmado por Cira Caballero, secretaria de Derechos Humanos, y Agustín Chamorro, secretario de Organización.
Comisión de diputados irá a Minga Guazú
Miembros de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara Baja anunciaron que la próxima semana se trasladarán hasta el lugar para escuchar las versiones de los familiares de los fallecidos y de los vecinos. El fiscal antisecuestro Rogelio Ortúzar tiene que ser procesado porque no puede portar armas de fuego y mucho menos de guerra, según sostuvo ayer el diputado de Patria Querida Sebastián Acha.
Asimismo, criticó que los propios representantes del Ministerio Público estén hablando de un supuesto "daño colateral" para justificar la muerte de un menor de 16 años durante el procedimiento realizado en el distrito de Minga Guazú el pasado fin semana.
"En términos civiles eso no existe, es un homicidio y tiene que ser investigado. Y aceptar la doctrina del efecto colateral en procedimientos policiales es dar carta blanca para que maten, es el gatillo fácil", indicó.
Añadió que de la forma como procedió el fiscal Ortúzar no se solucionará el problema de los secuestros, puesto hasta el momento no se tienen datos del dinero abonado por las víctimas del plagio ni tampoco se levantaron evidencias del caso.
"Hay que ayudar a que la gente de la zona también pueda hablar, los vecinos tienen miedo. Informes periodísticos decían que ni los chanchos quedaron de esa casa y eso no sabemos si fue también parte de los efectos colaterales que mencionan", señaló en tono irónico.
Orificios de balas muestran que se disparó desde el interior de la casa
No hay rastros de balas en la vivienda donde se produjo el “feroz tiroteo”
En la casa donde fueron acribilladas seis personas, entre ellas supuestos secuestradores, no existen rastros de la balacera que supuestamente se había registrado. La puerta del frente de la vivienda tampoco fue echada a patadas, como afirmó el fiscal Rogelio Ortúzar. La versión oficial sobre el hecho no tiene sustento y se acentúa la sospecha de una ejecución.
MINGA GUAZU (De nuestra redacción regional). El equipo de periodistas de este diario que el pasado jueves estuvo en la casa donde se registró el supuesto enfrentamiento en la mañana del sábado pasado no pudo divisar en las paredes de la humilde vivienda un solo rastro de la balacera que mencionan los intervinientes. Uno de los dormitorios de la casa donde según las autoridades hubo un tiroteo. No se observan rastros de proyectiles.
La puerta del frente de la casa, que de acuerdo a lo afirmado por el fiscal Rogelio Ortúzar fue echada a patadas, está intacta. El agente del Ministerio Público, quien ahora es conocido como “Rambo” o “Matrix”, había dicho que después de derribar la puerta hubo un intercambio de disparos dentro de la casa. Luego los malvivientes salieron afuera, donde cayeron abatidos.
El intercambio de disparos fue con armamento pesado, entre ellos fusiles automáticos. De haber ocurrido este enfrentamiento, algunas balas debieron incrustarse en las paredes de madera. Pero esto no existió.
El juez Manuel Trinidad Colmán, quien estuvo legalizando la acción, dijo que existió un intenso disparo y que hasta en los árboles se pueden ver los rastros de las balas. En el lugar no se pudo encontrar una sola planta que haya sido alcanzada por algún proyectil. Los únicos rastros de impacto de bala en el sitio estaban en la patrullera de la Policía, que presuntamente fue utilizada como señuelo; y en los cuerpos de seis personas, de las cuales tres tienen antecedentes por delitos comunes.
A medida que pasan los días, la versión oficial sobre lo ocurrido en el kilómetro 20, a cuatro mil metros de la Ruta VII, queda sin sustento. La sospecha de la ejecución sumaria de los tres presuntos malvivientes, quienes habrían participado de secuestros, y de otras tres personas que tenían vínculo con los primeros, tomó cuerpo y surgen evidencias.
Las víctimas son Julio César González, Rildo Ramírez, Cristian Morales Delfino, Amancio Leguizamón, Mario Leguizamón (16) y Nancy Martínez.
Testigo dijo que no vio armas en casa
CIUDAD PRESIDENTE FRANCO. (De nuestra redacción regional). Prudencio Leguizamón, padre de Mario Leguizamón y hermano de Amancio –ambos acribillados en Minga Guazú–, afirmó ayer que la noche antes de la refriega estuvo en la vivienda, pero que no vio ningún arma de fuego ni proyectiles dentro de ella.
Sostuvo también que no vio ningún bolso, aunque aclaró que no llegó a observar una de las piezas, porque después fue a dormir a lo de su hermana Mercedes. Sobre la presencia de los captores en su casa alegó que Julio César González, alias Papá Noel, era amigo de Amancio desde la infancia y este le dijo que estaban de visita por unos días.
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