Plantean creación de Instituto de Economía Solidaria por Ley

Hoy 14 de diciembre  los senadores Sixto Pereira, Vice Presidente Segundo del Senado por el  Partido Tekojoja y Carlos Filizola de País Solidario presentaron oficialmente en el Congreso el Proyecto de Ley que crea el “Instituto de Economía Solidaria”. Es con el objetivo de establecer un marco legal para fomentar experiencias o formas organizativas solidarias y rentables socialmente que ayude a combatir la pobreza  a través del fomento de alternativas de solución basado en el cooperativismo y otros modelos organizativos asociativos en el país.

 

El proyecto de Ley  nace como resultado de un esfuerzo colectivo de las organizaciones campesinas, y organizaciones de la sociedad civil canalizados a través de los representantes legislativos sensibles a estos sectores, cuyo objeto es dotar al Estado y a las organizaciones que vienen ejercitando experiencias de Economía Solidaria, de un instrumento jurídico amplio que posibilite la generación de servicios públicos para el apoyo y el fomento de la Economía Solidaria en el País

 

Nuestra Constitución Nacional es clara al respecto de fomentar experiencias o formas organizativas solidarias y rentables socialmente. Artículo 113 - DEL FOMENTO DE LAS COOPERATIVAS. El Estado fomentará la empresa cooperativa y otras formas asociativas de producción de bienes y de servicios, basadas en la solidaridad y la rentabilidad social, a las cuales garantizará su libre organización y su autonomía.

La Economía Solidaria plantea una economía al servicio de la sociedad,  recuperando su sentido social y político.  Es otra forma de hacer economía al servicio de las comunidades cuando  la acción de la economía pública y privada para hacer prevalecer un estado social de derecho resulte insuficiente .Las organizaciones de la Economía Solidaria son actores sin cuya activa participación y protagonismo el reconocimiento constitucional a la dignidad humana es letra muerta, ya que estas organizaciones pueden dar importantes aportes en el proceso de desarrollo nacional y merecen una mayor atención de la que se les ha prestado, debido a los problemas de desempleo y pobreza que hasta ahora no han podido ser resueltos ni por el Estado ni por la iniciativa privada.

Actualmente en el país existen numerosas iniciativas que no están siendo suficientemente apoyadas y fomentadas por el sector público como comités, asociaciones y pre-cooperativas de producción, de comercialización, almacenes de consumo, asociaciones de pequeños productores campesinos, etc., que buscan reproducir la vida en condiciones dignas de sus trabajadores y sus comunidades. El Instituto de Economía Solidaria se constituirá sin lugar en un pilar fundamental para la Reforma Agraria en función a los objetivos que persigue. Artículo 114° CN - DE LOS OBJETIVOS DE LA REFORMA AGRARIA. La reforma agraria es uno de los factores fundamentales para lograr el bienestar rural. Ella consiste en la incorporación efectiva de la población campesina al desarrollo económico y social de la Nación. Se adoptarán sistemas equitativos de distribución, propiedad y tenencia de la tierra; se organizarán el crédito y la asistencia técnica, educacional y sanitaria; se fomentará la creación de cooperativas agrícolas y de otras asociaciones similares, y se promoverá la producción, la industrialización y la racionalización del mercado para el desarrollo integral del agro.

El objetivo de la creación del Instituto de Economía Solidaria es disminuir la exclusión social, revertir el deterioro de las condiciones de vida, de conformidad al Artículo 6° de la CN - DE LA CALIDAD DE VIDA. La calidad de vida será promovida por el Estado mediante planes y políticas que reconozcan factores condicionantes, tales como la extrema pobreza y los impedimentos de la discapacidad o de la edad. Asimismo, busca generar un espacio económico basado en la solidaridad, la cooperación hacia dentro y hacia fuera de los emprendimientos de la Economía Solidaria.  Prevaleciendo así el bien público por sobre los intereses individuales. Artículo 128° CN - DE LA PRIMACIA DEL INTERES GENERAL. En ningún caso el interés de los particulares primará sobre el interés general.

La propuesta de creación de este instituto, se debe a la necesidad de construir una matriz social alternativa que busque superar los flagelos del desempleo y la pobreza que acosa a una importante fracción de la sociedad paraguaya y al mismo tiempo desarrollar las comunidades rurales y urbanas a partir de sus propias potencialidades para mejorar su calidad de vida. Artículo 38° CN - DEL DERECHO A LA DEFENSA DE LOS INTERESES DIFUSOS. Toda persona tiene derecho, individual o colectivamente, a reclamar a las autoridades públicas medidas para la defensa del ambiente, de la integridad del hábitat, de la salubridad pública, del acervo cultural nacional, de los intereses del consumidor y de otros que, por su naturaleza jurídica, pertenezcan a la comunidad y hagan relación con la calidad de vida y con el patrimonio colectivo.

 Estas experiencias a diferencia de la economía privada y pública se basan en los principios de: a) igualdad, b) toma democrática de decisiones c) distribución equitativa de ingresos c) solidaridad, d) protección del medio ambiente y de los intereses difusos. Por todo esto, el objetivo central de la Economía Solidaria es la reproducción de la vida de los sujetos y las comunidades. Para que esta matriz alternativa sea realmente solidaria y no simplemente un discurso, deben garantizarse los derechos humanos, económicos y sociales al conjunto de la sociedad:

•          Garantizar trabajo digno y seguro; satisfacción de las necesidades básicas; participación democrática en la vida social y política;  libertad de opinión; libertad de elecciones.

•          Asegurar la sustentabilidad de la vida humana en sociedad a partir de la reproducción de las condiciones materiales de la vida (ser humano y naturaleza).

•          Garantizar la no discriminación.

      •          Regular el mercado en función del bien común.

La Economía Solidaria no es un mero paliativo contra la pobreza y el desempleo, ella busca desarrollar otras formas de organizar el trabajo con otras formas de intercambio, para esto es imprescindible el desenvolvimiento de un sector integrado de emprendimientos e instituciones a ser regidas por los principios de la Economía Solidaria.

La Economía Solidaria en el marco de un Estrategia de Desarrollo Nacional debe intervenir en diferentes espacios y de maneras diversas en la creación de redes que unan a los emprendimientos entre sí y con los demás sectores de la Economía Nacional (Pública y Privada), en el abastecimiento y la comercialización de los productos, en el perfeccionamiento técnico y tecnológico y en la capacitación y educación a sus miembros.

Una forma positiva de intervención del Estado en la economía para aliviar la pobreza, es el financiamiento de los emprendimientos solidarios. Para ello es vital la revisión no sólo de los problemas de acceso al crédito, sino también de las ¨condiciones de acceso¨, donde además encontramos la necesidad de incorporar a la oferta de servicios financieros públicos una diversidad de nuevos servicios que no están disponibles para el pequeño productor como, la intermediación de remesas, cambios de monedas, seguros, leasing, administración de fideicomisos, creación de cooperativas donde puedan guardar sus depósitos etc.

Otra causa que justifica la intervención del Estado en el financiamiento es la falta de entidades bancarias privadas que ofrezcan y orienten sus créditos a bajo interés a la agricultura familiar y otras asociaciones u organizaciones con emprendimientos productivos, creando situaciones de verdadera desigualdad y discriminación. La diferencia de enfoque y de principios hace del Financiamiento Público un recurso necesario de forma a apoyar a los emprendimientos de la Economía Solidaria, en forma directa y autónoma del mercado financiero. Es importante recurrir a nuestra Carta Magna para reflejar esta situación. Artículo 46° - DE LA IGUALDAD DE LAS PERSONAS. Todos los habitantes de la República son iguales en dignidad y derechos. No se admiten discriminaciones. El Estado removerá los obstáculos e impedirá los factores que las mantengan o las propicien.

Las protecciones que se establezcan sobre desigualdades injustas no serán consideradas como factores discriminatorios sino igualitarios.

Por otro lado para la Economía Solidaria las finanzas no pueden ser fin en sí mismas, ellas son una herramienta para lograr de manera permanente mejores condiciones de vida y de trabajo para todos, contribuyendo a generar estructuras socioeconómicas que no reproduzcan la exclusión y la pobreza. Este proyecto busca no solo la sostenibilidad financiera, sino satisfacer las necesidades de servicios financieros de las comunidades.

Finalmente con la creación del Instituto de Economía Solidaria el beneficio del financiamiento trascenderá a los emprendimientos de éste, llegando a toda la comunidad.

 

Fuente: Secretaria de Comunicaciones del Partido Popular Tekojoja